En mayo de 2019, Loss Of Balance hacía su solo debut en su propio sello Rhod Records con el lanzamiento de El imperio de los deseos. Más de tres años después, este lunes 15 de noviembre de 2022, ha llegado la segunda parte.

Compartimos algunos apuntes acerca de esta segunda parte de El imperio de los deseos y también el track del release Denso, que ya tienes disponible siguiendo los enlaces que encontrarás al final del artículo.

Europa dejó de funcionar política y socialmente de manera explícita como conglomerado de Imperios hace algunos siglos (tampoco muchos). Sin embargo, tanto las consecuencias de aquella época imperial como el mismo término "imperio" sigue muy presente a día de hoy más allá del terreno geopolítico: su presencia en el mundo de la publicidad, la literatura o el cine está a la orden del día. En 1970 se estrenaba la película japonesa El Imperio de los sentidos, cuyo título hacía referencia de forma irónica, según parece, al libro de Roland Barthes El imperio de los signos.

Si seguimos en el terreno literario, en concreto en el ámbito del ensayo, sin salir de Anagrama Editorial encontramos (como mínimo) dos títulos que también hacen referencia a los imperios, el segundo de ellos haciendo clara referencia al término geopolítico: El imperio de lo efímero (2006), obra de Gilles Lipovetsky y el reciente ganador del Premio Anagrama de Ensayo (2022), Antes del antiimperialismo, obra de Josep M. Fradera.

La mera pretensión de adentrarme en cualquiera de estos títulos sin conocerlos debidamente —el autor que más leí, en su momento, fue Gilles Lipovetsky— supondría un arrollador acto demente por mi parte, y si he hecho esta pequeña enumeración de títulos en los que el término "imperio" aparece destacado no es por otra razón que por la de intentar señalar la posible intención de Loss Of Balance al haber titulado El imperio de los deseos a su EP, de cuya segunda parte podemos disfrutar desde esta misma tercera semana de noviembre.

Dentro de las diversas acepciones que encontramos de la palabra "imperio" en la RAE, nos quedamos aquí con la que incorpora "hegemonía" en su definición, por un lado. Por otro lado, copio y pego la definición de mero imperio: "Potestad que residía en el soberano y, por delegación, en ciertos señores o magistrados, para imponer, previo proceso, penas a los delincuentes".

Llegados a este punto, ya véis por dónde van mis reflexiones, y por dónde, quizás, apuntan los brumosos beats de la segunda parte de El imperio de los deseos de Loss Of Balance. Vivimos, efectivamente, en una sociedad en la que predomina, de manera cuasi hegemónica, el deseo como motor de acción. Deseo y necesidad, tan distintos sobre el papel, son vistos como algo prácticamente equiparable, y nuestro sistema económico trabaja incesantemente con su maquinaria de propaganda (aka publicidad) para que así sea. En este sentido, con tanto deseo desbocado e incapaces de pararnos los pies para discernir entre la necesidad y aquello que deseamos (en los deseos proyectamos mucho más de lo que realmente logramos al satisfacerlos), no es de extrañar que vivamos, en cierto modo, con la sensación de llevar una (o varias) penas impuestas: y si bien desear en sí no es malo, vivir encadenando deseos —algunos inalcanzables o cuya satisfacción nos impone años de deuda o la toma de decisiones que van en contra de nuestros propios intereses— es casi como una tortura existencial: ¿a quién beneficia el imperio de los deseos? Con esta pregunta, casi retórica, parece que esclarecemos tanto sufrimiento, puesto que no es aquel que logra satisfacerlos el mayor beneficiado, sino el que tiene los medios y la capacidad para imponer ciertos deseos a la mayoría. El que satisface sus deseos no es más que un "cumplidor", siendo el que los provoca el verdadero dueño del imperio.

Y si bien algunos deseos son connaturales a la especie humana, ya nuestro amigo Buda, hace unos milenios, advertía de que la verdadera fuente de la desdicha y la infelicidad era justamente el mero hecho de desear. El imperio de los deseos podría entenderse, en este sentido, como otra manera de decir La inagotable sensación de infelicidad.

En este sentido, si para satisfacer tus deseos necesitas hacer incluso un pacto con el diablo —llámale banco, llámale ignorancia, llámale como quieras—, mejor adéntrate en la propuesta electrónica de Loss Of Balance: por extraño que parezca, en esta segunda parte de El imperio de los deseos ha trabajado de tal manera los tracks que son a su vez aptos para la pista y, gracias a la complejidad del bajo y los kicks, cuya intensidad y vibración están solo a la altura de productores avanzados, son también material idóneo para la meditación en movimiento. Mucho sería decir que Buda los pondría en sus meditaciones guiadas si a día de hoy le tuviésemos entre nosotros, pero no es descabellado afirmar que desear hacerte con El imperio de los deseos pt 2 [sic] no es un deseo que vayas a saciar con la mera compra de los tracks ni con la escucha que puedes hacer aquí del track Denso: este release necesita varias escuchas, profundas, para comenzar a ejercer su potencia en tus oídos, en tu mente y cuerpo. Si lo pruebas en pista, como ya ha hecho DVS1 (lo pudimos saber gracias a una Story compartida por Loss Of Balance), sus efectos serán más intensos en los que estén bailando con un único deseo: el de ser sorprendidos en vez de complacidos. Porque no todo es oro lo que reluce en el "imperio del beat".

Track ID: Denso Artist: Loss Of Balance Label/Sello discográfico: Rhod Records


👉🏻
Rhod Records: Bandcamp · Soundcloud · Discogs · RA
👉🏻
Loss Of Balance: Soundcloud · Discogs · RA

Loss Of Balance también forma parte de Dust Trax con sus tracks Joanna y Alexandra.